sábado, 3 de diciembre de 2016

Tratos absurdos con el Demonio



Era un escritor medio pelo,
para sus adentros lo sabía.
Un día cansado del menosprecio
invocó al Demonio. 
- ¡Quiero ser el mejor escritor de todos los tiempos!
pidió sin titubeos. 
- Eso es probable, eso es posible;
aunque no es fácil de alcanzar, 
para ello deberás chupar... 
Contestó el Siniestro apenas apareció.
El joven artista sin demora
de rodillas se situó. 
Y del Rey del averno la entrepierna devoró. 
El maligno, una vez complacido,
al escritor se dirigió
chupar tu deberías 
pero alcohol yo me refería. 

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